¿Que qué hace VOX en Cádiz? Procurar lo mismo que en el resto de España , que no es otra cosa que hacer, cuando no rehacer, España. Liberarla de burocracia, echar abajo las líneas que dividen nuestras actuales y, sobradamente demostradas, inútiles autonomías, para equiparar a los españoles allá donde se encuentren unos con otros. Hacer que las Españas de primera, segunda o tercera categoría pasen a mejor vida, y reivindicar también, porque no hay mejor lugar que desde Cádiz, esa vuelta a la España que, en su diversidad, sepa tratar a todos los españoles como iguales.
Pocos años pasaron desde que España se dedicó a levantar fronteras en su interior a base de autonomismo, y el año en que se fue a Europa a apuntarse a la Unión Europea. Esa Europa que, precisamente, echaba barreras abajo para equipararnos progresivamente (esa era la idea) a todos los europeos. Y ahora estamos como estamos. En VOX queremos ser como en cualquier otra región de España, vivir en igualdad de condiciones. Pero, además, y por mas que resulte chocante, queremos que en otras regiones sean iguales que nosotros.
Queremos, desde la Tierra que acunó nuestra libertad, dar libertad al elector para que elija a quien desee y no a quien a la fuerza le pongan por delante. Queremos que cada uno se pague lo suyo con una nueva ley de partidos que elimine las subvenciones públicas (dinero de todos) a los partidos políticos. Porque, siendo yo de derechas ¿por qué tengo que financiar con mis impuestos a un partido de izquierdas? ¿Por qué alguien de izquierdas tiene que ver su dinero en manos de la derecha o de los ahora centristas?
Queremos que los aforados se reduzcan a la mínima expresión. Que lo que valga aquí, sirva igualmente en Alicante, en Tarragona, o en La Coruña. Que no haya más que una interpretación de nuestras leyes en el territorio español. Ya esta bien de multiplicar por 17 cada cuestión en España bajo la excusa de la peculiaridad de cada una de sus regiones. Eso dejémoslo para otras cuestiones culturales o turísticas, o la bienintencionada pretensión de hacernos tan autónomos nos llevará a autodestrucción de nuestra Nación, como  vienen demostrando el fallido Plan Ibarretxe (que, con la nueva configuración municipal y autonómica que se produzca, querrán resucitar); o el intento secesionista que no cesa, por la desconcertante muestra de autoridad de nuestro actual Presidente de Gobierno incapaz de actuar como debiera aun con la Constitución amparándole.
Queremos, a fin de cuentas, que lo de la gente sea de la gente; que el empresario sea capaz de crear empleo porque no esté atosigado a impuestos; que el trabajador disponga de las mejores condiciones de vida, porque el dinero suyo, gestionado por administraciones públicas, no acabe malgastado como a diario vemos en los medios.
Que la posibilidad de trabajar en España en igualdad de condiciones, sea efectiva y garantizada por nuestra Carta Magna, y no expuesta al capricho de gerifaltes políticos y su apartheid lingüístico, utilizado más como arma de separación que como quilates del tesoro cultural de la diversidad de la que presumir en España.
Vox en Cádiz tiene toda la razón de ser que se le quiera buscar, desde la necesidad de protección a la familia a la desaparición de tanto enchufismo generado por los distintos gobiernos municipales y autonómicos vividos.
Vox en Cádiz, porque somos liberales como aquella Constitución que nos hizo libres a los españoles, y porque queremos que nuestros votos salgan de las urnas con el mismo color que cada español decida, y no con el que le guste al neocacique de turno.
Aquí estamos, #SomosVox.
#Somoslostuyos.

¿Qué queda de las ideologías en la política hoy?
La izquierda comparte principios básicos, se supone, de los que reniega cuando llega la hora de "la acción", convertida en una especia de principio subliminal, no explícito, en su corpus ideológico, y que no duda en burlar la ley si la ley no le es favorable.
Lo del olvido de lo conseguido por el diálogo durante años queda a un lado. O es lo que ellos piensen o no hay más qué pensar.
Esto, del PSOE hacia más allá por la izquierda. Lo del PSOE es caso aparte.
Esos del más allá del PSOE han vaciado de principios su actuación. No hay debate posible ante la unilateralidad del "conmigo o contra mí". La democracia en un hilo. No hay principios a la vista de los hechos. Y no hay principios cuando aquello que los legítima, la Constitución, es obviado, cuando no despreciado, repudiado directamente.
Previamente, todo se ha vestido de cercanía, de eso que llaman populismo y que, por los antecedentes, termina rendido a los brazos de cuanto el poder ofrece, comenzando por el olvido… Lo de gobernar a golpe de ideología sólo es el principio. La careta desaparece, todo no es más que “fachada”.
Lo del PSOE, caso aparte decía, roza lo surrealista. Un partido, supuestamente, a la izquierda que igual se entrega al separatismo que al populismo; que se enrolla en la bandera de España pretendiendo monopolizarla como hizo con el concepto “progreso”; o que se propone erradicar el paro y la corrupción cuando de eso saben todo lo contrario, o que nos venden un líder nacional que se sabe hipotecado a la voluntad de lo que Andalucía decida, con todo lo que ello supone, y lo saben…pretendiendo que España todo lo pase por alto.
Un PSOE, en estas circunstancias, con un proyecto, si cabe llamarlo así, que carece del aderezo necesario para hacer que una Nación se reconozca a sí misma, mirándose por donde se mire. A menos que se pretenda presentar a España como la ejemplificación del País empeñado en poner su unidad continuamente a prueba, a base de elevar toda cuestión a la categoría de lo negociable a poco que se tengan la más mínima oportunidad. Eso sí, todo vestido con el traje de la estabilidad que pueda dar a un Estado un partido político en el peor momento de su historia política, en cuanto a resultados y a la confianza en la gestión que ofrecen sus representantes, léase ERE´s, v.g..
Hoy, los intereses partidarios impiden que la ideología marque algún tipo de rumbo. Todo el que llega promete el cambio. Nada es, según lo observado, aprovechable, y mientras España pagando la mutabilidad a la que la someten.
Lo del PP ya roza la esquizofrenia. La desbandada de militantes, a la vista de lo que hoy ofrece el partido de Mariano, está siendo de esas para las que no se encuentra, o se elude buscar, un responsable. El propio Aznar ya no sabe qué posicionamiento anunciar en los mítines a los que le piden que acuda. Lo último: el PP es un partido de centro, Aznar dixit las últimas Elecciones Autonómicas/Municipales. Lo de ser de centro reformista, o liberal, o de centro derecha, no hablemos ya de ser derechas, ha quedado en el baúl de los recuerdos. Vaya por delante, que a nadie se le ocurra reivindicar ese lugar de la política, porque si es así se le llamará extremista, se le impedirá difundir su mensaje en los medios de comunicación y, de paso, se va invirtiendo en quedarse sin tener con quién pactar cuando llegue el momento…que llegará. Y, mientras, llega Ciudadanos marca el paso político de lo que debe hacer el PP en adelante, tanto a nivel político interno como a nivel público: ¡¡PRIMARIAS!!, esa palabra… y la ideología impuesta por otro.
No hay forma de hablar de España sin que nada quede al capricho del que suceda al que está, sea lo importante que sea el tema. ¿Cuántos cambios en educación llevamos? ¿Cuántas dudas a la hora de actuar en por de la unidad de España en cada provocación secesionista? ¿Cuántas diferencias entre españoles en sanidad, en fiscalidad a mayor gloria del autonomismo fracasado?
Efectivamente, comenzaba a hablar de #VOX, la derecha, así sin complejo alguno.
Inconcebible la posición de alguno cuando te comenta si no te avergüenzas de decir que eres de #VOX, que eres de derechas. Pues va a ser que no. Que estoy donde quiero, en lo que creo. En ese partido dispuesto a gobernar sin necesidad de andar dando bandazos de un escaño a otro a ver quién nos da su voto. Porque para VOX los votos que valen son los de cada español a quienes ofrecemos un proyecto unitario, coherente, inconfundible, y cargado de la responsabilidad que supone saber que España es la ideología que nos mueve a no perder jamás la esperanza de hacerla reconocible a todo español dispuesto a reconocerse en ella, a eliminar sin ambages, con nuestra Constitución y nuestras legislación en la mano, cualquier duda acerca de su identidad, de su unidad, de los motivos que os llevan a sentirnos y enorgullecernos de ser lo que somos: ESPAÑOLES.
No vi por parte alguna, algún proyecto político que, sin renunciar a sus principios sino a partir de ellos, se vea y se sienta capaz de coordinarlos con cada necesidad, cada problema, cada iniciativa que sacar adelante, y seguir siendo ambos, nuestra España y VOX a sus mandos,  plenamente reconocibles.
Es nuestra ideología y es nuestra propuesta: España, toda España, por delante.
#Somoslostuyos

No sé hasta qué punto, a estas alturas del siglo XXI, es posible hablar de España sin antes tener que pedir permiso, y explicar qué es eso de España y aquello que vaya a constituir el objeto del debate, del artículo o de la simple exposición de argumentos sobre lo que de ¿nuestra? Nación vayamos a argüir.
Porque una Nación que rehúye de su bandera, de su emblema ante el Mundo, que lo menosprecia y lo aparta a los sótanos de algún lugar perdido de un Ayuntamiento como el de Cádiz, por ejemplo, justificándose en el viento de levante (con la de vendavales que lleva soportados nuestra enseña nacional), suena a cachondeo de chirigotero fracasado, a ganas de provocar y después llamar fascistas a quienes lo único que procuran es que España siga siendo España, y no un no sé qué…ni ellos tampoco, pero sin que a ellos les importe (a mí sí me importa).
Porque una Nación que vio perder paisanos socialistas a manos de terroristas, difícilmente podría comprender que ahora sus compañeros, a los apologetas de aquellos que mataron a sus compañeros, les alisen el camino para que ¿gobiernen? las instituciones donde la ley les permitió ser elegidos, y lo primero que hagan sea volver a arriar la enseña nacional porque no se reconocen en la misma que les puso ahí. ¿Te enteras Pedro Sánchez y compañeros del tal Pedro?
Porque una Nación como España no puede permitirse tener capitales y autonomías gobernadas y representadas por gentes que, del respeto a las creencias de los demás, comprenden tan sólo el de aquellos que les amedrentan. Y eso ni es España ni nuestra Constitución le da amparo ¡¡Al miedo, no!!
Porque no puede ser que España esté pendiente de una región como la catalana, históricamente leal a España, que ahora se inventa lo incomprensible y pita hasta lo inadmisible, cuando debe hasta de callarse ante una Nación como España a la que no hace más que ponerle la manita (y los irresponsables de turno, ponerles la otra mejilla para seguir soltando lo que la ¿solidaridad? interterritorial, dicen, obliga).
Porque la mentira se ha instalado en España por la fuerza de la demagogia, vendiendo defensas de la mayoría y procurando pactos de perdedores allende cualquier zona del territorio nacional (véase Valencia, Baleares, Navarra con una Pamplona proetarra), con el ya consabido desprecio a todo lo español que, a continuación, nos sirven como buffet de lo que nos espera.
Y partidos que, convertidos en adalides de la huida en tropel de los corruptos, ahora maquillan su discurso y en Madrid o Andalucía se alían con unos y otros, como si la ciudadanía, precisamente, la CIUDADANÍA, no supiera que sólo una cuestión de fechas quita a Griñán en medio en Andalucía, pero ¿y de Chaves qué sabemos? ¿Dimitirá pocos días antes de que acabe la legislatura, allá cuando otoño comience a asomar su flequillo, para decir que ha dimitido por que C´s le obligó? ¡Venga ya Rivera!
Se haría muy largo recordar tanto caso de extraños pactos de unos con otros que nadie esperaba. Todos a la sombra de la misma bandera que repudian, pero hoy ya les inflan los bolsillos y, les guste o no, les convierte a TODOS en la casta de políticos traidores, a TODOS (y TODAS, para quienes gustan de semejante e iletrada gilipollez).
Es hora de posicionarse: ¿a la deriva ideológica con el PP? ¿Con un PSOE entregados al populismo en unos sitios y en otros gobernando con C's dándoles con la puerta en el hocico y dejándoles  "mareaos"...? ¿Con CIUDADANOS envalentonados y diciendo unas cosas en campaña, y aburguesados y mintiendo tras la misma? ¿Con PODEMOS, por el que ahora tantos se arrepienten de haberles dado "bola mediática"...?
Siendo correctos, sería más exacto, y absolutamente necesario, hablar de buscar un proyecto para toda España. Para una España reconocible como tal España en La Coruña o en Almería, en Canarias o en Baleares, en Cáceres o en Murcia. Es necesario recuperar España para España. Saber que allá por donde nos movamos, nosotros mismos o quienes nos visiten sepan, que esto es España, con toda su diversidad, pero también con todo cuanto nos identifica.
Es irrenunciable apoyar proyectos que hablen de España y la boca no se les llene de llagas. España no es la que tiene la culpa de nada, es la que hemos de recuperar de todos aquellos que, hurtándonos su identidad, nos la devolvieron enmerdada hasta lo irreconocible, por la ineptitud y mala leche de todos esos a quienes hay que poner donde deben estar, pero sin confundir a estos con España.
Ni nuestra Constitución, ni nuestro Himno, ni nuestra Bandera son corrupción, son nuestra razón de ser, nuestra ESENCIA. No confundamos, ya llevamos demasiado tiempo en esa confusión, así nos va… y, peligrosamente, comienza a seguir yéndonos.
Requerimos para España un proyecto que existe, que no oscila en función de los tiempos, que tiene principios, y que estos se fundamentan y defienden a toda costa nuestra Constitución y nuestra Nación.
Ya saben que les hablo de #VOX, que somos VOX, que #Somoslostuyos, y que no vamos a consentir que España se convierta en el mercadillo de asientos y de tomas de decisiones al antojo de quien tome la poltrona.
Estamos por España, por todos vosotros, por toda España. Quien así de claro no se declare, puede darse por portavoz del miedo, de la traición y/o de la mentira.
El proyecto se llama #VOX, el fin ESPAÑA.

¿Es posible ser de derecha en esta España del siglo XXI? Es posible, viable y digno de confianza. 
Así de claro, así de convencido, así de comprometido ante el panorama que el día de San Antonio nos ha dejado en nuestra Nación mirando hacia cada consistorio.
Es posible porque existe #VOX. Es viable porque #VOX se ajusta y defiende cada renglón de nuestra Constitución. Es digno de confianza porque no sé yo de otros que antepongan nada al interés y el engrandecimiento de España, comenzando por su Unidad y continuando por el orgullo de pertenecer a la misma.
Aquí estamos. Nacidos en el siglo XXI, absolutamente ajenos a concepciones políticas de ayer que sobrepasen el sentido común; queriendo aquello que cualquiera quiere y pretende para su casa, para su pueblo, para su País. Ni más, ni menos.
Poniendo las cosas claras desde el principio, posicionándonos en cuantos frente políticos nos cuestionen, para que se acerque y nos apoye quien así lo desee. O para que continúe errando todo aquel que piense que somos, precisamente, lo que no somos. 
Somos VOX hoy, en la España de hoy, con los problemas y la ilusión que nos mueve a solucionarlos hoy, contando con todos y cada uno de los españoles y de aquellos que deseen sumarse a este proyecto, que si algo no somete a la incertidumbre son sus ideas de base que moverán sus acciones cuando llegue el momento.
Porque creemos y defendemos la Unidad de España, la dignidad de los españoles, la defensa de la vida de los no nacidos y de quienes puedan ver en algún momento su vida en manos del criterio de otro como él. Porque creemos en la libertad individual y, como reiteramos cuantas veces sean necesarias, que somos liberales en lo económico y conservadores en lo moral.
Otros, a todo eso, ya renunciaron. Nosotros lo reivindicamos, porque muchos españoles lo exigen y nos sentimos compelidos a evitar que suceda lo indeseable.
Somos VOX hoy y pensando en mañana, fieles a España, leales a nuestra Constitución, gentes que reclamamos un lugar en la política que, habiendo quedado deliberadamente libre por quienes lo repudiaron, nosotros pretendemos reavivar, con una concepción de la derecha nueva, de hoy pero íntimamente arraigada a los valores de una Patria entregada gracilmente y alegremente a quienes España ni la quieren ni les importa ni moverían un dedo por ella si así se les requiriese. Y, lo peor, siendo algunos de sus capituladores los tradicionalmente llamados a defenderla, aunque fuera bajo pretensiones federalistas.
Queda España hoy para mirarse y verse, pensarse y darse cuenta, como así el tiempo dirá, que merece ser para sí misma mejor. Recuperarse para sí, y buscar a quienes la antepongan a cualquier cuestión ajena a este siglo, extremadamente ajeno a aquel al que otros nos quieren devolver por la inacción, omisión o manifiesta incapacidad de los predecesores a los, desde hoy, actuales representantes y responsables de nuestras ciudades y pueblos.
Entonces, en ese momento, ahí estaremos. Porque no nació VOX para traicionar ni para mal entender o reinterpretar a capricho la voluntad y el voto de cada español, sino para devolver España a España misma. 
Ahí estaremos. Ahí nos encontraréis.
#Somoslostuyos

Bueno, pues ya tenemos Presidenta y tal. Y tal y como los votantes de Ciudadanos querían ¿no? Porque eso es lo que los votantes de C's han votado ¿no? Un apoyo expreso a Susana Díaz, previo pacto sobre una serie de puntos que todos los afiliados y votantes de Ciudadanos conocían de antemano, pero no podían contar porque la confidencialidad tiene estas cosas, supongo.Así que, a partir de ahora, a hocicar con lo pactado, y manos libres a Susana para que en los ayuntamientos se gobierne de cualquier manera, haya quien haya ganado, y todo gracias a que Ciudadanos ese punto poco le importa, viendo cómo valora semejante idea el tal Marín, ese hombre capaz de afiliarse a cualquier sigla hasta llegar al escaño allá donde se hallase ¡Todo un ejemplo de constancia! (La fidelidad a los principios, si eso, lo dejamos para otro día, u otra Diaz...).
Y hablando de ayuntamientos ¡vaya lío ahora cada vez que alguno llame para pedir algo al Gobierno andaluz!
- Oye, que llaman desde Villatraca para pedir no sé qué
- Y allí ¿gobernamos, pactamos, nos han echado, hemos estado a punto pero no pudo ser y nos ha dado dos puestos de chofer...?
Básicamente esa puede ser la situación en más de una ocasión. Ponerte a la espera hasta que se enteren y te atiendan, o te prometan que sí, que ya te veré...
Y todo que vendrá a enredarse aún más cuando toquen elecciones generales, y a ver qué dicen Ciudadanos que ellos nunca harían, para decir después que se ofrecen para garantizar la estabilidad de un País que, innecesariamente, tiene que ser apuntalado por todas partes ante la irresponsabilidad de unos pocos, incapaces de mantener un discurso que ahora visten como si siempre hubiesen dicho aquello de lo que siempre renegaron.
Pero bueno, esto es lo que querían los votantes de Ciudadanos, tan fascinadamente persuadidos  ante la presencia del tal Rivera en Andalucía.
Y si no es eso ¿qué? ¿Ahora cómo lo arreglamos? ¿Solicitáis convocatorias de asambleas para censurar a vuestro líder andaluz y quitarle de en medio? No creo, muchos sabéis de la posibilidad de gobernar desde la oposición mejor de lo que lo hizo IUCA desde dentro del propio Gobierno. Total Susana es una pardilla extraordinariamente manipulable, sobre todo si le sacas los ERE's ¿o tampoco? O le podéis echar en cara que llegó hasta ahí a dedo de sus antecesores que son... ¿Quienes son...? Es que el tal Marín y el tal Rivera reclamaban no recuerdo bien el qué de esos dos, hoy ya, investigados.
¡Ojú, qué plan! Un gobierno socialista en minoría acosado por la corrupción; unos avalistas del mismo que no se quieren mojar y comienzan a oler a humedad; y una oposición "mareá" que no puede por un lado; e irreconocible por otro que ya no sabe dónde situarse por no saber lo que son.
Eso sí, el cambio ha llegado Andalucía. Si lo veis, avisadme por favor.