Qué preocupación no rondará las cabezas del populareo por Génova 13, para que desde hace algún tiempo comiencen a circular artículos que apuntan directamente a VOX como parte culpable del posible batacazo de los de Rajoy y/o de Aznar en los próximos comicios generales.
Artículos que apelan a nuestra responsabilidad ante un posible pacto PSOE-PODEMOS que les aúpe al poder, porque VOX les haya quitado al PP ¿cuántos diputados suponen que podría conseguir Vox, pero eluden mencionar? Vox no es responsable de las renuncias ajenas a principios o a políticas de quienes, abandonando todo canon o hilo conductor, se entregaron a la mera gestión económica de la cosa pública, olvidando que una Nación sin principios termina volviéndose irreconocible para sí misma, y entregada al capricho de quienes la quieren pulir ora de una forma, ora de otra, para permanecer siendo nada. En Vox no tenemos la culpa, sino el honor de existir para disponernos en favor de España para tratar de darle a nuestra Nación el perfil que entendemos que ha de tener. Ahí están nuestros Manifiesto y Estatutos, libres y firmes como la misma Constitución Española que defendemos. En Vox no sabemos de mandar a callar a nadie. En Vox no tuvimos la culpa de irnos porque no pudiéramos haber cambiado desde dentro al PP como se nos pide, por la sencilla razón que hace diferir la esencia de VOX de la del PP: Vox es de sus afiliados. El PP es de FAES y de Aznar, sus militantes allí no están más que para aplaudir, o someterse a la "Inquisición" no manifiesta que termina arrinconándote si persistes en la discrepancia con lo que ves. Que estos tipos nos pidan que deberíamos haber intentado cambiar el PP desde dentro en vez de irnos, delata la ignorancia del propio tipo sobre las cosas del PP, o bien una fallida maledicencia acerca de cómo funciona el partido que, hasta ahora, preside Rajoy. Precisamente, quien en su tarea de modernizar el partido tiró por tierra cuantas propuestas de primarias le hicieron en su última conferencia #porelfuturodeEspaña. Y ello, no en virtud de experiencias propias, si no de lo que han hecho en otros sitios (¡¡pues aprenda caballero , aprenda!!). En Vox no tenemos culpa de que del PP apenas quede nada de lo que fue, deslizándose cada vez más por la cruz de la balanza hacia la izquierda, y desarmando de argumentos y, sobre todo, de respaldo político a aquellos que aún defendemos la vida como derecho, la unidad de España como tarea primordial del Estado, y la igualdad y el progreso (esa palabra que parece monopolio de la izquierda) de todos los españoles como medio inexcusable para el engrandecimiento de nuestra Patria. Ellos, los peperos, sabrán qué han permitido en estos últimos 4 o 5 años para verse en la tesitura a la que se verán abocados, pero especialmente, a la que nos abocarán a todos los españoles. Tanto afán por dividir la izquierda les llevó hasta aquí , y a saber a dónde nos arrastrará a todos, si el sentido de la responsabilidad no imbuye el voto en conciencia de los españoles y deciden dar una oportunidad a la derecha para que evite el abismo hacia el que, dicen, bracea España, y no por culpa de Vox. Los españoles han de saber que se puede ser de derechas y no estar condicionados por el pasado, sino compelidos por nuestro futuro. Porque esa es la filosofía de Vox, hacer del trabajo de hoy la semilla de una España prospera mañana. Y allá quien decida blandir el ayer para tratar de distraer nuestra atención y nuestro quehacer. Somos Vox, ya apelé a lo mismo artículos atrás, la derecha del siglo XXI, nacida en el siglo XXI y dispuestos a reivindicar, desde el más estricto sentido de la responsabilidad y el compromiso adquirido por nuestra condición de militantes de Vox, España para sí misma, esto es, para todos y cada uno de los españoles. Y allá aquellos que consignen a otros la culpa por la dejadez en el ejercicio de sus propias responsabilidades.
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Autor Antonio Palomar García (13/02/1969). Archivos
Agosto 2023
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